Ejemplos de sesgos
El concepto de sesgo puede emplearse en la práctica para describir algo grave o seriedad en el semblante, así como también para aludir a aquello que se ubica de manera oblicua o que se encuentra torcido o cortado.
Asimismo, se reconoce como sesgo al término medio que se considera en negocios de carácter dudoso. En el campo de la Estadística, en tanto, se utiliza este vocablo para hacer referencia a un error sistemático que se desencadena al seleccionar o priorizar ciertas respuestas en el marco de un ensayo o muestreo.
De centrar nuestra atención en Astronomía observacional, por otra parte, identificaremos al Sesgo de Malmquist, cuyo nombre refiere al astrónomo sueco Karl Gunnar Malmquist, el primer en describir este efecto de selección.
Los expertos en Informática y en Electrónica, por detallar otra aplicación de la noción, utilizan la expresión “sesgo de reloj” para indicar la desviación que se produce en dispositivos en los cuales se mide el tiempo (como en los ordenadores y los relojes).
Otro caso a tener en cuenta es el sesgo de información científica, el cual a su vez se ramifica en las categorías de sesgo del idioma (en función de la lengua elegida para publicar un informe científico), sesgo de ubicación (según los medios y vías elegidos para difundir los datos), sesgo del tiempo en publicar (si los resultados se comunican de manera inmediata o se posterga su divulgación) y sesgo en publicación científica (de acuerdo a la orientación y naturaleza de la información obtenida), por señalar algunas alternativas a modo orientativo.
El sesgo cognitivo, el sesgo de correspondencia, el sesgo muestral y el sesgo mediático son otras opciones a tener en cuenta al momento de comprender qué y cómo es el sesgo.