Ejemplos de sexismo
La teoría indica que la discriminación motivada por el género al que pertenezca cada individuo se define como sexismo.
Un estudio que se llevó a cabo en una universidad estadounidense, por ejemplo, hizo foco en los problemas y peligros que representa el sexismo a nivel mental. El sexismo provoca, según se desprende de la realidad, que mucha gente defienda enérgicamente y adopte actitudes masculinas vinculadas a la idea de superioridad y poder frente al género femenino, y tolere conductas de autosuficiencia y el estilo definido como ‘playboy’, generándose así injusticias y hechos repudiables a nivel social.
Un artículo periodístico publicado en El Nacional de Caracas, por señalar otro caso a modo de referencia, centra la atención en el sexismo presente en el campo de la inteligencia artificial, ámbito en el cual un grupo de personas donde predominan los hombres crea robots con apariencia y nombres de mujer. Los desarrollos robóticos de inspiración femenina están al servicio del usuario y son atractivos y atentos, cosificando de este modo a la mujer y alimentando estereotipos de género.
Y si aludimos a los estereotipos, nada mejor que darle protagonismo a la campaña “Inspiring Girls” que fue exitosa en Reino Unido y desembarcó en suelo español con el objetivo de terminar con el sexismo a fin de que los estudiantes no limiten sus deseos en función de las clasificaciones sociales que establecen qué está bien visto para los niños y cuáles son las actividades que se aceptan para las niñas.
Varias ciudades, por otra parte, buscan concientizar a la población para eliminar el sexismo en relación a los juguetes, para que en la infancia se garantice la libertad de que cada uno se entretenga y explore sus habilidades con los elementos que más los cautiven. Así, entonces, se permitiría que las niñas jueguen con herramientas, coches y soldaditos, y que los niños se diviertan con muñecas, utensilios de cocina y maquillajes.