Ejemplos de sociolecto

23 enero, 2017

La noción de sociolecto no está incluida, al menos por el momento, en el diccionario de la Real Academia Española (RAE) pero, aún así, se trata de una palabra de uso amplio que se aprovecha como sinónimo de dialecto social, una expresión que hace foco en la variedad lingüística propia de una determinada clase social.

El sociolecto, por lo tanto, está reservado a un grupo que forma parte de una comunidad. Quienes comparten este código de expresión utilizan vocablos que no son comprendidos o adoptados por gente de otro estatus, aunque puede ocurrir de vez en cuando que un término se expanda y sea aceptado y utilizado sin diferenciación social. Explicado de otro modo más sencillo y directo: el sociolecto determina la manera de comunicarse que tienen entre sí aquellos que pertenecen a las clases sociales más bajas pero también el vocabulario empleado por los más adinerados.

El sociolecto queda expuesto a nivel general cuando una misma idea es descripta con diferentes palabras por parte de dos individuos que no comparten el rango social y que, por lo tanto, tienen estilos de vida, costumbres y conocimientos diferentes. “Necesito unos mangos para la birra” y “Necesito dinero para comprar cerveza” son oraciones que apuntan a lo mismo, pero con un lenguaje que varía por los términos seleccionados en cada ocasión. Así ocurre también con “El vago labura para comprarse altas llantas” y “El muchacho trabaja para comprarse buenas zapatillas”, por indicar otra posibilidad que ayuda a comprender con simpleza cómo se entiende en la práctica el concepto de sociolecto.