Ejemplos de adverbios
El adverbio, según describe la Real Academia Española, es aquella palabra invariable que complementa el significado de los verbos, los adjetivos, de otros adverbios y de algunas secuencias. Algunos, tal el caso de términos como “cuando”, “cuanto” y “donde”, pueden funcionar como relativos correspondientes a los adverbios demostrativos y tener un perfil interrogativo o exclamativo.
Son varias las clases de adverbios que se pueden distinguir, por eso a continuación ofreceremos ejemplos de cada categoría y explicaremos a qué grupo pertenecen.
“Ahí estaba el cadáver”, “Detrás del árbol hay un pozo” y “Mi gato se escondió debajo de la cama” son oraciones que atesoran los adverbios de lugar ahí, detrás y debajo, mientras que “Todavía no se ha procesado tu solicitud”, “Nunca perdonaré lo que me han hecho” y “Hoy preparé milanesas” son frases en las cuales se advierten adverbios de tiempo (todavía, nunca y hoy).
Haciendo uso de los denominados adverbios de modo, por otra parte, se pueden construir enunciados como “Rendí bien el exámen”, “Caminé despacio para no agitarme” y “El paciente ya se siente mejor”.
Si se intentan identificar los adverbios de cantidad, asimismo, habrá que extraer sólo los vocablos “mucho”, “bastante” y “demasiado” de expresiones como las siguientes: “Tus palabras me causaron mucho dolor”, “Está bastante asustado por lo ocurrido” y “La bolsa estaba demasiado pesada como para levantarla”.
“Efectivamente, se logró detener al sospechoso”, “Es verdaderamente un milagro que ese niño haya salido ileso del derrumbe” y “Sí se pudo resolver el enigma” presentan adverbios de afirmación, mientras que “Jamás abandonaría a una mascota”, “Nunca ví esa novela” y “Santiago tampoco logró entender la consigna” están armadas con adverbios de negación.