Ejemplos de oro
Al mencionar la idea de oro, gran parte de nosotros piensa en joyas, monedas y en apliques de esculturas o imágenes religiosas (“El manto de la Virgen está decorado con hilos de oro”, “La imagen tiene una corona de oro”) realizados con este metal precioso de tonalidad amarillenta. Asimismo, frente a este vocablo derivado del latín aurum, hay quienes recuerdan un aniversario matrimonial (se acostumbra decir que las parejas que cumplen cincuenta años de casados celebran las Bodas de Oro), así como también hay gente que lo asocia al ámbito futbolístico (por el ‘gol de oro’ y el ‘balón de oro’, entre otras expresiones), al ámbito musical (al vender cierta cantidad de copias, los artistas reciben el reconocimiento de Disco de Oro) y al plano lúdico (hay un palo, dentro de la baraja española, que se conoce como oro).
Se trata, tal como se deduce del párrafo anterior, de una palabra de amplio alcance que se puede adaptar a múltiples contextos. A fin de conocer más de cerca a este término, en esta oportunidad hemos querido desde este espacio recordar sus diversas definiciones y ofrecer ejemplos a partir de oraciones y expresiones donde esta noción aparezca aprovechada.
De investigar por el lado de los coleccionistas, por citar una posibilidad, podremos descubrir que hay a nivel mundial muchas personas que atesoran antiguas monedas fabricadas en oro. Del mismo modo, hay intelectuales, deportistas y músicos que conservan en su hogar varias medallas de oro recibidas a lo largo de sus respectivas trayectorias por sus logros profesionales.
Un hombre que desea agasajar a su esposa con una joya importante que logre cautivarla, en cambio, puede invertir en una cadena de oro de diferentes kilates y optar entre variedades como el oro amarillo, el oro blanco, el oro rosa, el oro rojo, el oro azul o el oro verde.