Ejemplos de hiatos
El hiato es un término derivado del latín hiātus que posee múltiples significados. Según la Real Academia Española, es correcto utilizarlo para nombrar a la aparición consecutiva de dos vocales que por cuestiones de estilo no se pronuncian en una misma sílaba, pero también es válida su aplicación en el ámbito poético para hacer mención al quiebre de una sinalefa para alargar un verso.
Además, en anatomía es frecuente utilizar este vocablo para describir a un agujero en las formaciones anatómicas, así como la geología lo presenta como a un periodo sin sedimentación. La medicina, por su parte, habla de hernia de hiato cuando se detecta una protusión de parte del estómago que se extiende a través del diafragma desde la cavidad abdominal hasta al tórax.
El hiato referente al lenguaje que marca la inexistencia de un diptongo puede ser simple (categoría determinada por la unión de dos vocales abiertas o de dos cerradas iguales) o acentual (tipo de hiato caracterizado por el encuentro de una vocal cerrada con tilde y una abierta).
De ambos grupos pueden mencionarse como ejemplos a palabras como aorta, croar, conocía, paella, león, grúa, psicología, continúan, maúlla, zoófico, chiismo y semiimputable.
A nivel práctico, es posible hallar hiatos en expresiones cotidianas como las que figuran a continuación:
“Si me gradúo este año, me regalan un viaje a Europa”, “Mi hermano no confía en mí”, “Juan Tenulovich es un experto en sociología que goza de reconocimiento a nivel mundial”, “El policía evitó el asalto”, “Colecciono boletos capicúas”, “Joaquín sueña con viajar en tranvía”.