Ejemplos de divisiones
La división (del latín divisĭo) es un término que da idea de separación, de discordia y de distribución, aunque también hace referencia a la operación de dividir y a los grupos de personas que pertenecen a un mismo conjunto.
Ante estas múltiples definiciones, es posible hallar numerosos ejemplos prácticos de casos de división.
En el ámbito matemático es sencillo reconocer la división ya que es la operación aritmética que permite establecer cuántas veces una cifra está contenida en otro número. Por ejemplo: si se divide 16 por 2, el resultado es 8 ya que para llegar a 16 hay que sumar 8 veces el número 2.
En cambio, si al concepto se lo aborda desde la taxonomía, se lo entiende como una categoría ubicada entre el reino y la clase que tiene como sinónimo al vocablo Filo. Por ejemplo: El helecho (pterophyta) pertenece al reino Plantae, a la división Pteridophyta y a la clase Filicopsida.
Una división empresarial, por su parte, es un sector de una compañía que, por lo general, es independiente de otras divisiones corporativas y ocupa un rol jerárquico dentro de la firma.
Asimismo, una división puede ser geográfica y estar destinada a marcar límites, por ejemplo, de una ciudad o provincia dentro de un país.
Claro que, en la vida cotidiana, también es posible reconocer casos de divisiones. Si los padres de cuatro niños, por ejemplo, compran varios chocolates, deberán repartir en partes iguales el dulce para que todos los pequeños disfruten la fracción que les corresponde. De igual manera, si un grupo de jóvenes decide jugar un partido de fútbol, deberán dividirse en dos grupos para poder enfrentarse en el juego.