Ejemplos de activos financieros
La expresión “activo financiero” se utiliza para hacer alusión a los activos intangibles que se materializan por medio de una anotación contable o un título. De acuerdo a los expertos, son las unidades económicas de gasto las que emiten esta clase de activos que, para aquellos que los tienen en su poder, son un medio para conservar su riqueza y, para quienes los crean, constituyen un pasivo.
Para que resulte más fácil de entender la noción sin necesidad de utilizar vocabulario técnico, complementaremos este artículo con ejemplos concretos de elementos que se consideran parte de este conjunto.
Al analizar la práctica, entonces, encontraremos que un activo financiero puede ser una cierta cantidad de dinero en efectivo como un pagaré. También aparecen como alternativas a tener en cuenta los créditos surgidos de alguna transacción u operación (que puede ser de carácter comercial o no), los bonos, las acciones, las participaciones en cooperativas o sociedades de inversión colectiva y las permutas financieras con valor favorable para la compañía involucrada.
Es interesante señalar que pueden reconocerse no sólo activos financieros comunes (aquellos que generan beneficios en el momento o en un plazo específico a raíz de un contrato, como ocurre cuando el dinero se recibe en efectivo o se tienen bonos, acciones, etc) sino también activos financieros alternativos (que generan derechos a partir de un contrato u operación por el cual se aguardan utilidades o beneficios económicos a futuro, como ocurre con las inversiones en fondos de capital privado o en fondos de cobertura, por mencionar algunos a modo de referencia).