Ejemplos de aeróbicos
Los expertos en Biología definen como aeróbicos a los organismos que requieren oxígeno para poder subsistir y realizar sus procesos vitales. Estos especialistas también vinculan el término con la idea de aerobiosis o respiración celular.
Claro que, para la mayoría de la gente, la noción de aeróbico o aeróbica guarda relación con el ejercicio físico necesario para mantener el cuerpo en buen estado a partir de actividades simples y hasta cotidianas, como el caminar, el bailar y el trotar.
Si pensamos en la definición relacionada al proceso respiratorio en el cual el oxígeno es fundamental, entonces podemos señalar sin lugar a dudas que el ser humano, es decir, la especie a la cual pertenecemos, es un organismo aeróbico o aerobio. El resto de los animales que habitan el planeta (perros, gatos, conejos, ratones, jirafas, elefantes, etc), así como también las plantas son otros especímenes que se incluyen en el conjunto aeróbico.
De centrar nuestra atención en las rutinas que podemos implementar para mover el esqueleto y mejorar sin mayores esfuerzos las funciones de nuestro organismo, entonces además de las acciones mencionadas líneas arriba encontraremos actividades que, además de generarnos beneficios físicos, nos mantendrán activos y entretenidos. Dar paseos en bicicleta, nadar, patinar, remar, saltar la soga (o cuerda) y hacer gimnasia, siempre de manera controlada y sin extender el tiempo de práctica en casos de que el entrenamiento sea intensivo (no más de veinte minutos dos veces por semana para los planes intensos), son opciones que están consideradas dentro del plan de ejercicios aeróbicos.