Ejemplos de bases químicas
Desde el plano de la Química, una base es una sustancia que, en disolución, incrementa la concentración de iones hidroxilo y se combina con los ácidos para formar sales.
Si bien se trata de un concepto algo difícil de comprender si no se tienen conocimientos complementarios, a continuación intentaremos ofrecer una aproximación hacia la noción de base química a través de ejemplos concretos.
Respecto a esta clase de sustancias, hay que decir que existen bases químicas fuertes (aquellas que consiguen disociarse por completo en agua) y otras que se consideran débiles. El hidróxido potásico y el hidróxido de aluminio son, por ejemplo, muestras específicas de cada una de las respectivas modalidades. Por su parte, el ion hidróxido (OH) se caracteriza por ser una superbase, es decir, ser la base más poderosa que puede funcionar en disolución acuosa ya que el resto de las bases fuertes consiguen neutralizar el agua como los ácidos.
Cabe resaltar que las superbases pueden clasificarse en función de sus particularidades como orgánicas (como lo es, por ejemplo, el compuesto conocido como diisopropilamida de litio y el que recibe el nombre de N,N-diisopropiletilamina o base de Hünig, por citar algunos), organometálicas e inorgánicas.
Para ampliar el espectro y conocer un poco más sobre bases químicas, se puede citar a los antiácidos que se utilizan en medicina para combatir la acidez estomacal como bases débiles, una condición que los lleva a desarrollar una especie de mecanismo que permite la neutralización cuando formar agua y una sal tras reaccionar con el ácido estomacal.