Ejemplos de bibliotecas
La biblioteca es ese mueble o estantería donde se lucen varios libros de distintas temáticas, autores y géneros. Claro que también el término da nombre a aquella institución creada para adquirir, conservar, catalogar y exponer publicaciones y documentación literaria.
Según sean sus características y finalidades, los espacios que atesoran toda clase de libros pueden ser presentados de diferentes maneras. Aquella que surge por motivación propia y tiene como objetivo deleitar a quien amplía y/o protege su contenido, por ejemplo, puede ser definida como una biblioteca personal, mientras que la que se desarrolla en una institución académica para proveer materiales de consulta a los estudiantes recibe el nombre de biblioteca universitaria.
Por la importancia cultural que poseen y los beneficios que proporcionan estos sitios, en el mundo existe una gran cantidad de bibliotecas, de distinta antigüedad y particularidades.
Hace un tiempo, por ejemplo, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y la UNESCO se unieron para impulsar la Biblioteca Digital Mundial (BDM o WDL), así como la Junta de Andalucía decidió aprovechar los avances tecnológicos para poner en marcha la iniciativa conocida como Biblioteca Virtual de Andalucía.
Más tradicionales y menos vanguardistas que ellas son las que se inauguraron hace muchos años y aún subsisten e identifican a cada región que las vio nacer. Por lo general, reciben la calificación de biblioteca nacional, tal como ocurre hoy en día con la Biblioteca Nacional de México, la de Argentina, la de Chile y la de Guatemala, por citar algunas de las más antiguas.