Ejemplos de ciencias formales
Las disciplinas que apelan al método deductivo para arribar a saberes coherentes y racionales y se centran en procedimientos donde entran en juego los cálculos y las estructuras lógicas están enmarcadas en el conjunto de las ciencias formales.
Dentro de este grupo aparecen materias focalizadas en sistemas formales que se diferencian de otras por validar teorías a partir de axiomas, definiciones, reglas de inferencia y proposiciones.
A modo de orientación, podemos señalar como ciencias formales a la Matemática, a la Estadística y a la Lógica. En el primer caso, se trata de una ciencia que vamos descubriendo desde edad temprana en el colegio, donde se nos enseña a operar con números, a reconocer las figuras geométricas y a realizar razonamientos prácticos que se vuelven más complejos a medida que adquirimos más conocimientos y dominamos ciertos procesos para efectuar mediciones, cálculos y deducciones.
Como parte de la Matemática se pueden reconocer las áreas de la Aritmética (centrada en las cifras y las operaciones que se realizan con ellas), el Álgebra (donde se opera con dígitos, signos y letras) y la Geometría (basada en el análisis de propiedades y medidas de figuras en el espacio o en el plano).
La Estadística, por su parte, es una disciplina asociada a la Matemática que aprovecha datos numéricos para conseguir conclusiones haciendo uso del recurso de calcular probabilidades.
La Lógica, en cambio, es una ciencia formal que gira en torno a las leyes, las formas y las metodologías propias del conocimiento científico. En este campo, las conclusiones se logran en base al análisis de premisas.