Ejemplos de confianza
La confianza está relacionada a la seguridad, a la fe y a la esperanza que se puede experimentar sobre uno mismo y sobre otros. Tiene relación con creer y convencerse de que algo es o saldrá tal como uno intuye.
Por describir numerosas situaciones que sirven para ilustrar qué es y en qué contextos surge la confianza, un elemento clave para desarrollar vínculos humanos pero que muchas veces se ve traicionado y provoca desilusiones y desencantos.
– Si no hay confianza en un vínculo de pareja, por ejemplo, no se puede mantener una relación armoniosa. Uno tiene que estar seguro de la persona que eligió para compartir la vida (no estar preocupado o todo el tiempo con miedo a ser engañado) y, al mismo tiempo, inspirar seguridad para que no haya temores respecto a los sentimientos y modos de actuar de ninguna de las dos partes involucradas.
– Para llevar a cabo de manera exitosa una determinada acción es imprescindible tener confianza en uno mismo. Es necesario creer y estar seguro de las propias habilidades y capacidades: si un futbolista no confía en su destreza deportiva y duda acerca de sus posibilidades para hacer un gol, seguramente tendrá un mal desempeño y fallará en las jugadas. Pero si está convencido de su buen nivel, tiene confianza en su preparación y cree en su talento, su actuación será brillante.
– Cuando se requiere dejar a un hijo pequeño al cuidado de otra persona (por razones laborales, frecuentemente), es necesario elegir a alguien de extrema confianza para estar tranquilos y dejar al niño en buenas manos. Y en ese círculo de confianza, de acuerdo a los vínculos de cada uno, pueden aparecer una abuela, un tío, una vecina, etc.