Ejemplos de conurbación
La teoría establece que una conurbación consiste en una agrupación de núcleos urbanos que, en un primer momento, eran colindantes pero conservaban su independencia y, a raíz de su desarrollo y evolución, se convirtieron en una unidad funcional.
Existen, hoy en día, numerosas conurbaciones a nivel mundial, algunas de las cuales detallaremos a continuación a modo de referencia.
Si nos detenemos en suelo chileno, por plantear una posibilidad, advertiremos que en la región de Coquimbo existe la conurbación La Serena-Coquimbo, un área que se destaca como la cuarta zona metropolitana más poblada del país. En la región del Biobío de esta misma nación, en tanto, la unificación de Chillán Viejo y Chillán ha dado origen a una conurbación muy tenida en cuenta a nivel turístico por los atractivos culturales e históricos que ofrece.
España, por su parte, atesora en la provincia de Alicante a la conurbación Elda-Petrel, cuyos habitantes se dividen entre el dominio de la lengua valenciana y el castellano. El territorio uruguayo, en tanto, alberga a la conurbación Maldonado-Punta del Este, uno de los territorios urbanos que más ha crecido en Uruguay en las últimas décadas, producto de la construcción y el turismo.
Al buscar otras referencias sobre este concepto, también aparece como una opción a tener en cuenta la conurbación Manabí Centro ubicada en Ecuador y compuesta por las ciudades de Rocafuerte, Jaramijó, Santa Ana, Montecristi, Portoviejo y Manta. Esta región, que despierta un gran interés turístico por sus paisajes y espacios de relevancia histórica, se destaca como un centro pesquero y agrícola.