Ejemplos de conversión
La idea de conversión abarca numerosas acciones propias de distintos ámbitos pero, básicamente, se relaciona con el acto de convertir algo en otra cosa o transformarse uno mismo en un ser con diferentes rasgos o creencias.
Una conversión militar, por ejemplo, consiste en la mutación (alteración, cambio) de una fila del frente a partir del giro de uno de sus extremos. Una conversión religiosa, por otra parte, indica que alguien ha decidido asumir una fe o religión diferente a la que tuvo en algún momento. Un hombre, por describir una alternativa, pudo haber sido ateo hasta su juventud pero, por elección tras enfrentar una situación límite, llevar adelante el proceso de conversión para vivir como católico los últimos años de su vida.
La conversión de divisas, en tanto, da cuenta del traslado de valores de una moneda a otra mediante una operación financiera que permite, por señalar una posibilidad concreta, trasladar el valor de un dólar a un euro.
Asimismo, pueden reconocerse acciones de conversión de un coche común a vehículo eléctrico y conseguir electricidad en base a la conversión fotovoltaica que transforma a la energía solar.
Otras opciones que amplían el alcance de esta noción: conversión de coordenadas celestes a coordenadas ecuatoriales, conversión analógica-digital (para pasar de señales analógicas o señales digitales), conversión interna (expresión empleada en Física Nuclear) y terapia de conversión (teoría polémica y duramente cuestionada a escala mundial que también se conoce como de reorientación sexual porque hay quienes sostienen que una persona homosexual puede transformarse o ‘reconvertirse’ en heterosexual si recibe el tratamiento adecuado).