Ejemplos de decretos
Los decretos son órdenes o reglas que, por lo general, establece el Poder Ejecutivo para reglamentar una cuestión o situación sin llegar a tener la importancia de una ley (aunque hay que tener en cuenta que sí existe el decreto ley, de carácter legislativo que, por una situación excepcional, es promulgado por el Poder Ejecutivo). Estas decisiones también pueden ser formuladas por un juez o tribunal. Incluso el Papa, en el marco de la Iglesia Católica, puede consultar a los cardenales para generar un decreto.
El libro de Derecho Canónico conocido como “Decreto de Graciano”, por ejemplo, es una obra que elaboró el monje y profesor de Teología Graciano recopilando textos que permitieron consolidar, durante la Alta y Baja Edad Media, el Derecho de la Iglesia Católica.
Corría el año 1492, asimismo, cuando en la Alhambra los monarcas que después se transformarían en los Reyes Católicos impulsaron el Decreto de la Alhambra, también conocido como Edicto de Granada. Este material tenía como fin expulsar de la Corona de Castilla y la Corona de Aragón a los judíos. En diciembre de 1969, este decreto fue derogado oficialmente de manera formal.
En abril de 1937, por otra parte, en plena Guerra Civil Española, el dictador Francisco Franco promulgó un Decreto de Unificación, una norma jurídica que llevó a fusionar partidos políticos para instaurar un partido único, que se conoció bajo la denominación de Falange Española Tradicionalista y de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista (nombre que, para abreviarlo, fue identificado con las siglas FET y de las JONS).