Ejemplos de elongación
La idea de elongación está presente en el mundo de la Medicina, la Mecánica, la Física, la Biología y la Astronomía.
Los cirujanos ortopedistas, por ejemplo, en ocasiones realizan elongaciones óseas que les permiten corregir de manera quirúrgica las malformaciones óseas de carácter congénito que presentan sus pacientes o bien alargar algunos huesos. Para conseguir el alargamiento de una cierta estructura ósea se suelen emplear diversas técnicas, donde aparecen como opciones los clavos intramedulares y los fijadores externos.
Al realizar actividades deportivas, ya sea de manera profesional o simplemente para mantenerse en buen estado físico, también resulta fundamental el desarrollo de ejercicios de elongación. Esta rutina de estiramiento muscular aumenta el rango de movimiento además de minimizar el riesgo de sufrir lesiones, relaja el cuerpo y favorece la coordinación y la circulación sanguínea. De todas maneras, también la elongación se entiende como una lesión: así ocurrió en su momento con el futbolista argentino Lionel Messi, quien estuvo inactivo durante varias semanas por sufrir en su pierna derecha una elongación en el bíceps femoral.
Con una buena elongación muscular, por señalar algunas posibilidades a modo de referencia, una persona adulta puede llegar a tomar con sus manos la punta de uno de sus pies para acercarlo a la nuca, puede abrir sus piernas de lado a lado hasta formar una única línea o hasta levantar una pierna por encima de la cabeza sin flexionar la rodilla. Incluso con ciertos recaudos las embarazadas también se pueden beneficiar a partir de los ejercicios de elongación que les dan flexibilidad y relajación muscular.