Ejemplos de emancipación
El acto y consecuencia de emanciparse se define como emancipación. Al analizar múltiples casos de emancipación se puede llegar a la conclusión de que esta acción le otorga a una persona (o a un grupo) autonomía, es decir, confiere independencia y libertad, con todo lo que ello implica.
A lo largo de la Historia, por describir un hecho específico que sirve para comprender en qué consiste esta noción, el género femenino consiguió emancipación para la mujer. Esto se tradujo en la reivindicación de sus derechos y la igualdad entre ellas y los hombres para dejar de estar subordinadas a decisiones masculinas. Con la emancipación llegó un rol más activo de la mujer dentro de la sociedad, pudiendo participar por ejemplo del sufragio y conseguir empleos dignos con sueldos similares a los de los hombres.
A fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX, por citar otra referencia, se produjo en Irlanda y Gran Bretaña un proceso conocido como Emancipación Católica que tuvo como fin erradicar o al menos minimizar las condiciones y limitaciones que le habían sido impuestas a los católicos romanos.
Por otra parte, hay que saber que a nivel mundial se puede gestionar la emancipación legal de un hijo. Según la legislación vigente en cada país, los padres pueden realizar un trámite para que los menores de edad tengan la emancipación. Un joven de 16 años que desea contraer matrimonio, por señalar un caso posible, puede obtener la emancipación y así comenzar a tener derechos y obligaciones como un mayor de edad.