Ejemplos de emigración
El acto de emigrar se conoce como emigración. Cuando una persona abandona de manera temporal su país de origen para instalarse en el extranjero por motivos puntuales (trabajo, en la mayoría de los casos), alimenta la modalidad conocida como emigración golondrina.
Si la cantidad de gente que desea marchar al exterior con fines de asentarse fuera de la propia patria es significativa, entonces se hace alusión a la emigración masiva. Una ciudad donde, además de consecuencias de origen natural por tener un volcán cerca, se sufre la falta de oportunidades laborales y no hay buenos servicios de salud, seguramente comience a quedar vacía cuando la gente decida apostar por la emigración en busca de mejores condiciones de vida.
Una familia que vive en una ciudad socialmente convulsionada como consecuencia de conflictos económicos y políticos que derivan en enfrentamientos violentos entre vecinos, saqueos y otras situaciones peligrosas, por describir una alternativa, puede llegar a optar por la emigración para tener una mejor perspectiva de futuro en un sitio más tranquilo.
Según estadísticas difundidas por diversos medios de comunicación, por citar otro caso que ilustra el tema de la emigración, a comienzos del siglo XXI hubo en Cuba un índice elevado de emigración. Hoy en día, la mayoría de quienes deciden marchar de este territorio lo hace motivada por el afán de buscar oportunidades propicias para consolidar una carrera. En suelo estadounidense, afirman algunos testimonios, un cubano puede conseguir mejor remuneración, libertad para acceder a una propiedad y autonomía para aplicar sus conocimientos profesionales sin condicionamientos ni obstáculos.