Ejemplos de escepticismo
El escepticismo se reconoce como la desconfianza, la incertidumbre y la vacilación respecto a la eficacia, validez o veracidad de una determinada cosa o fenómeno. La teoría establece además que este término identifica a la doctrina basada en la afirmación que sostiene que la verdad es inexistente o que, al menos, el ser humano no la conoce.
Es posible reconocer el escepticismo científico (aquel que se apoya en conocimientos científicos para rebatir ciertas creencias ajenas a las observaciones y pruebas perceptibles) y al escepticismo religioso (pone en duda pensamientos, afirmaciones y creencias vinculadas a la religión).
En la práctica, esta noción se aprovecha en múltiples circunstancias. La falta de confianza en los gobernantes, puede generar en una comunidad escepticismo colectivo ya que se pueden tener razones para sentir que ninguna autoridad representa a los ciudadanos ni defiende sus intereses y, por lo tanto, es factible que la sociedad no les crea sus promesas de campaña.
Un anuncio sobre el descubrimiento de una cura para una enfermedad terminal, de igual forma, puede ser tomado con escepticismo por sectores que creen encontrar en esa revelación una estrategia de marketing de un laboratorio o sospechan de alguna maniobra para recaudar dinero sin demostrar primero la efectividad sostenida en el tiempo del innovador tratamiento presentado.
También se reconoce a escala global un gran escepticismo respecto a la vida extraterrestre. Si bien hay quienes aportan teorías y estudios para abonar esta creencia, hay otros que no creen estas versiones y rechazan toda posibilidad de visitas alienígenas a nuestro planeta.