Ejemplos de flora
Una gran cantidad de referencias podemos encontrar al abordar el concepto de flora desde diversas perspectivas.
Si centramos la atención en las plantas más abundantes en una región o nación, por ejemplo, distinguiremos floras autóctonas, floras agrícolas y floras de la maleza. Es posible diferenciar además a la flora apícola (plantas, hierbas y arbustos útiles para la apicultura).
Las publicaciones basadas en la vegetación propia de un territorio, en tanto, se clasifican como tratados sobre flora. Entre 1775 y 1798, por ejemplo, el entomólogo y botánico inglés William Curtis publicó una revista temática titulada “Flora Londinensis: or Pilates and Descriptions of Such Plants as Grow Wild in the Environs of London” y, años más tarde, apareció “Flora Londinensis (second edition)”. En 1806 y hasta 1840, además, James Edward Smith y John Sibthorp enriquecieron al rubro con un libro lanzado en varios volúmenes llamado “Flora graeca”.
Diferente a los casos anteriores es la interpretación del término como el grupo de microorganismos que se adaptan a un cierto medio, tal como ocurre con la flora intestinal o bacteriana. Se trata de una familia de bacterias presente en el intestino que, salvo excepciones, resultan beneficiosas para la salud.
Al profundizar en los alcances de esta palabra, también advertimos que se ha aprovechado para bautizar a municipios, suburbios y ciudades de países como Noruega, Filipinas y Estados Unidos. Asimismo, se puede recordar que, de acuerdo a la mitología romana, Flora es la diosa de la primavera, los jardines y las flores. Con esta figura como inspiración, se decidió usar su nombre para identificar a un asteroide.