Ejemplos de ignorancia
Ignorancia es un término que deriva del latín ignorantĭa y hace referencia a la falta de ciencia, letras y noticias tanto general como particular sobre algo o alguien. Esta ausencia de conocimiento puede abordarse desde una perspectiva absoluta para catalogar de ignorante a un individuo y/o grupo social o relacionarlo con un contenido concreto para indicar que hay cosas que faltan saber sobre la cuestión mencionada.
Cabe resaltar que, en ciertas ocasiones, la ignorancia puede ser utilizada como un insulto para despreciar a alguien y minimizarlo frente al resto debido a su desinformación o conocimientos inadecuados.
La ignorancia, en todos los ámbitos, desencadena múltiples inconvenientes y hasta puede generar la muerte de un ser vivo. Por no consultar al médico y evitar los chequeos de rutina, por ejemplo, un adulto puede no ser consciente de su condición de hipertenso. Esa ignorancia puede costarle la vida ya que, al no asumirse como hipertenso, puede mantener hábitos contraproducentes para su estado.
El analfabetismo y la falta de oportunidades en los sectores más humildes, asimismo, conduce a realidades indeseadas generadas por la ignorancia. Una mujer que no sabe leer ni escribir, por ejemplo, puede ser engañada para lograr que firme un documento que la involucra en asuntos enmarcados por fuera de la ley o que habilita a otro a tener beneficios que no deberían corresponderle.
Otro de los casos que puede ser asociado con la ignorancia está relacionado a la esperanza de personas que, por no tener acceso suficiente a la información y confiar demasiado en la buena voluntad de un tercero, creen que al resignar lo poco que tienen pueden lograr que ese médico que les ha prometido curar toda clase de cáncer consiga el objetivo sin saber ni sospechar que se trata de un engaño para sacarles dinero.