Ejemplos de mnemotecnia
Para estimular la mente y lograr recordar algo con facilidad es usual apelar a técnicas de asociación agrupadas bajo el nombre de mnemotecnia. Se trata de herramientas de memorización que aprovechan saberes ya asimilados para relacionarlos con datos nuevos.
Hay muchos métodos que ayudan a retener información y a estimular la mente de manera creativa, incluso haciendo uso de las manos (aprovechando los nudillos) para poder, por ejemplo, no olvidar nunca cuáles son los meses que poseen 31 días.
Para poder saber de modo sencillo si una persona tiene cáncer de piel o hay sospechas de esta enfermedad, por indicar otra referencia, los dermatólogos se guían por una mnemotecnia clínica basada en las primeras cinco letras del abecedario para analizar al paciente. La A alude a la asimetría de los lunares evaluados, la B a los bordes, la C al color de los lunares, la D al diámetro y la E a la evolución y estabilidad de la mancha o lesión en cuestión.
En la vida cotidiana, en tanto, se puede apelar al armado de palabras mediante las iniciales de diversos vocablos a recordar para no olvidar la información. Por ejemplo, si no tenemos que olvidarnos las especies de animales que se crían en el campo familiar, podemos hacer una enumeración inicial hasta hallar una palabra fácil de recordar. Si hay cerdos, abejas, vacas y ovejas, el término clave será CAVO. El mismo método puede aplicarse para memorizar cómo formó un plantel de fútbol durante un partido: Orozco, Ramírez, Ugarte, García, Arrechea, Tabarez, Romero, Olmos, Nervo, Estigarribia y Suárez (ORUGATRONES).