Ejemplos de narrador omnisciente
Omnisciente es un adjetivo que se le atribuye a todo ser que posee omnisciencia, es decir, un conocimiento absoluto de todo lo posible y real. A la hora de construir un relato, un autor tiene la posibilidad de elegir entre diferentes clases de narradores, entre ellos, el narrador omnisciente. Así se define al narrador que, a medida que avanza la trama, proporciona detalles de la historia porque la conoce por completo y sabe qué piensan y sienten los personajes, por ejemplo. Es, en definitiva, una especie de Dios ya que accede al conocimiento pleno e ilimitado.
La estructura de un texto donde se apela al narrador omnisciente está en tercera persona. A continuación, a modo orientativo, incluiremos algunos extractos que permiten identificar al narrador omnisciente:
“Y como cada noche, ella recordó la cara de su amado antes de conciliar el sueño. En lo más profundo de su corazón la joven sabía que, pese a todo, él la amaba. La atormentaba no tener el coraje suficiente para perdonarlo y darle una oportunidad, pero su miedo a sufrir una vez más la paralizaba…”
“Todavía no había amanecido cuando el sonido del teléfono interrumpió el sueño de José. Del otro lado, una mujer con voz agitada intentaba informarle hacia dónde se dirigía. En cuestión de segundos, mientras disimulaba su nerviosismo por la situación, el artesano Pepe, tal como lo conocían sus amigos y vecinos, saltó de la cama y comenzó a vestirse para llegar cuanto antes al hospital donde su hija se convertiría por primera vez en madre y lo transformaría a él en abuelo, un título que José anheló durante mucho tiempo”.