Ejemplos de omisiones
Se entiende por omisión, en líneas generales, a la abstención de hacer o decir algo. Claro que este vocablo, tal como se desprende de las definiciones avaladas por la Real Academia Española, también es útil para describir el descuido o flojedad de quien tiene algún asunto a su cargo y para resaltar la falta de ejecución de una cosa.
En ciertos países, como por ejemplo España, este concepto se aprovecha para presentar al delito de omisión de socorro, el cual se basa en la abstención de una actuación que representa un deber legal, tal como lo es el brindar asistencia a menores discapacitados.
El pecado de omisión, por su parte, es aquel en el que se incurre cuando no se hace aquello que uno está obligado a cumplir por ley moral. Desde la perspectiva de la Psicología, asimismo, existe un tipo de condicionamiento instrumental que se denomina entrenamiento de omisión y surge cuando una determinada conducta es razón para la omisión de una recompensa.
También se repara en el significado de omisión cuando se construye un texto debido a que existe un recurso conocido bajo el nombre de figuras de omisión que tiene la particularidad de suprimir un elemento lingüístico necesario. Una de estas figuras es la elipsis, la cual permite eliminar algún término de la oración sin que ella pierda sentido: “Yo comí cazuela de mariscos y ellos, guiso de cordero”.
Para terminar de completar este artículo informativo, a continuación, otros ejemplos de uso de la palabra omisión:
“Hubo omisiones periciales que perjudicaron la investigación”
“Se detectaron muchas omisiones en el formulario que se le dio para completar”
“El contador me advirtió que no puede haber omisiones de datos en la declaración jurada”