Ejemplos de patrimonio cultural
Los patrimonios, es decir, todo aquello que un individuo adquiere o hereda y forma parte de sus bienes, pueden ser clasificados de diversas maneras en función de las características que posean los elementos sometidos a consideración.
Así, pues, es posible distinguir entre patrimonios nacionales, patrimonios naturales y patrimonios culturales, entre muchas otras alternativas. Precisamente, hoy vamos a hacer referencia al grupo de bienes que, por la importancia que han tenido dentro de la cultura de una cierta población, se conservan y protegen a lo largo del tiempo por considerarse como patrimonios culturales.
Entre los numerosos sitios que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha declarado hasta el momento como Patrimonio Cultural aparecen, por citar algunas referencias concretas, el Centro Histórico de la Ciudad de México (área que forma parte del listado oficial desde 1987); el Poblado e Iglesia de Gammelstad (inscriptos en el listado de UNESCO en 1996); la Cueva de las Manos (situada en Argentina y protegida por la UNESCO desde 1999); los rincones culturales de la isla griega de Delos (protegidos desde 1990) y el Centro Histórico de Oporto.
De investigar más en profundidad y a gran escala, es posible reconocer también como patrimonio cultural de la humanidad a las Fortificaciones de la Costa Caribe de Panamá, a la Iglesia de Madera de Urnes (en Noruega), la Catedral de León (en Nicaragua), a la ciudad boliviana de Potosí y al Conjunto Histórico y Cultural de las Islas Solovetsky, entre muchos otros lugares.