Ejemplos de polímeros
La palabra ‘polímero’ procede de un vocablo griego y se utiliza en español para identificar a un compuesto de origen químico que puede tener una raíz natural o sintética y que se forma a partir de un proceso de polimerización. Se trata, según los expertos, de macromoléculas ya que en su composición se observa la repetición de ciertas unidades estructurales que pueden organizarse de manera lineal o bien estar ramificadas y tener entrecruzamientos.
Para analizar los polímeros y encontrar ejemplos concretos de ellos, primero es necesario realizar una clasificación en torno a diversos criterios. Así, entonces, se podrá saber que las proteínas y los ácidos nucleicos, por ejemplo, son polímeros naturales que pueden ser hallados en la naturaleza, mientras que el polietileno, el nylon y el poliestireno son polímeros sintéticos. El caucho vulcanizado y la nitrocelulosa, por su parte, se definen como polímeros semisintéticos.
De hacer foco en el sistema de polimerización elegido, en cambio, se hablará de polímeros de adición o de polímeros de condensación, así como el estudio de sus componentes químicos da espacio a la denominación, según corresponda, de polímeros orgánicos, polímeros orgánicos no vinílicos y de polímeros inorgánicos.
Más allá de las maneras de agrupar a los polímeros y de las referencias dadas en los párrafos anteriores, es posible agregar al listado de polímeros al polipropileno, al policloruro de vinilo (PVC), a la silicona, al policarbonato y al poliletereftalato de etileno (PET), entre muchos otros materiales muy populares y presentes en elementos utilizados en la vida cotidiana.