Ejemplos de reducir
Para poder bajar el nivel de algo, disminuir su tamaño o aminorar la intensidad, calidad o cantidad de algo, es fundamental realizar la acción de reducir.
Al reciclar elementos de uso cotidiano, por ejemplo, conseguimos reducir la cantidad de basura generada. Un envase plástico, una lata o una caja de cartón, por indicar algunas posibilidades, al ser transformados en otros objetos (portalápices, floreros, etc) no terminan en el cesto de residuos. Asimismo, es posible reducir a escala general los niveles de contaminación con acciones simples que ayudan mucho a la naturaleza, como usar bicicleta en vez de automóvil, no dejando colillas de cigarrillo en la arena ni desechos en la vía pública, no utilizar productos ni llevar a cabo actividades que provoquen sustancias contaminantes, etc.
Hay quienes por cuestiones estéticas y/o de salud, por su parte, realizan ejercicio físico y adoptan un plan de alimentación específico para reducir la cintura. Muchas mujeres, en tanto, se someten a intervenciones quirúrgicas para reducir el tamaño de sus senos y hacen tratamientos para reducir estrías, por indicar alternativas comunes. Reducir el consumo de sal o de azúcar, según la patología de cada persona, también es clave para conservar la salud.
Para que una imagen guardada en el ordenador no sea tan grande y pesada, en tanto, se pueden reducir las medidas originales del archivo. Y si tomamos la responsabilidad de conducir un vehículo es imprescindible reducir la velocidad para no excedernos de las marcas permitidas y garantizar la seguridad propia y de terceros al llegar a esquinas o al avanzar por zonas que requieren circular a escasa velocidad (proximidades de escuelas y hospitales).