Ejemplos de restas
Hoy en día, se apela al concepto de resta para hacer referencia a una operación aritmética que también se conoce en el plano matemático con el nombre de sustracción, pero no siempre fue así.
Si uno consulta el diccionario de la Real Academia Española (RAE), podrá saber que, en otros tiempos, esta palabra tenía un origen latino que se traducía al español como cuerda y que permitía aludir a la idea de ristra (trenza generalmente armada con tallos de cebollas o de ajos).
De centrar la atención en la resta abordada como un proceso matemático, estaremos frente a un ejercicio basado en la eliminación de una cierta cantidad que se opone a la operación conocida como adición o suma.
Para llegar al resultado correcto en una resta, uno debe prestar atención a la cifra establecida como minuendo y al número del sustraendo para, una vez hecho el cálculo, establecer la diferencia o resto. Por citar algunos ejercicios simples a modo de ejemplo:
18 – 16 = 2
50 – 38 = 12
45 – 13 = 32
Por fuera de este ámbito, la palabra ‘resta’ suele aprovecharse en la vida cotidiana para mencionar una carencia o hacer referencia a algo que falta conseguir, hacer o enfrentar. A continuación, algunas oraciones que permiten apreciar cómo se acostumbra usar la noción.
“Ya terminé el examen, ahora resta esperar la devolución del profesor”
“Para lo que resta de la jornada, se esperan precipitaciones de moderada intensidad y temperatura en descenso”
“Por lo general, se viste bien pero resta muchos puntos cuando luce sombreros extravagantes”
“Según los médicos, el deportista no podrá jugar en lo que resta del año”
“El artista le resta importancia a las críticas sobre su desempeño actoral en su más reciente película”