Ejemplos de rimas
Cuando se elabora una poesía o, simplemente, se crea un verso, es posible hacer uso de la rima, un recurso basado en la reproducción de un mismo fonema que, al ser pronunciado y oido, ofrece la sensación de que dos o más palabras se parecen en función de su musicalidad.
A veces, las rimas son consonantes, es decir, poseen fonemas que se repiten desde una vocal tónica. En otras ocasiones, en cambio, las rimas son asonantes porque no logran esa similitud de fonemas y sólo hay coincidencia en el orden de las vocales empleadas.
Demos lugar a diversos ejemplos, sean parte de poesías reconocidas a nivel mundial o versos ideados para la ocasión, para apreciar cómo lucen las rimas más allá de lo que pueda decir de ellas su correspondiente definición teórica:
– “Yo soy un sueño, un imposible / vano fantasma de niebla y luz. / Soy incorpórea, soy intangible: / no puedo amarte… ¡Oh ven, ven tú!” (Gustavo Adolfo Bécquer)
– “Sobre los agrios campos caía un sol de fuego. / Un buitre de anchas alas con majestuoso vuelo / cruzaba solitario el puro azul del cielo” (Antonio Machado)
– “Sabio maestro mio, / ¿dónde has estado, dónde te has ido? / Regresa ya a mi lado / y déjame contarte / cuánto te he querido”
– “Una emoción / sale de mi corazón / cuando escucho la canción / que alimenta mi pasión”
– “Tu presencia me calma, / tu amor me salva, / tu indiferencia me desgarra…”