Ejemplos de satélites
Los expertos en Astronomía definen a los satélites (palabra derivada del término latino satelles) como cuerpos celestes opacos que giran en torno a un planeta primario y que no son capaces de brillar por sí mismos sino que lo hacen por la luz reflejada por el Sol. Por su parte, quienes se especializan en cuestiones mecánicas reservan el concepto para identificar a una pieza de engranaje que puede girar con libertad sobre un eje.
De profundizar en los significados de este vocablo, podremos aprender a diferenciar a los satélites naturales (como el caso de la Luna) respecto a los satélites artificiales (dispositivos con una cierta vida útil que, mientras funcionan, pueden orbitar en torno a planetas o asteroides y, con el tiempo, quedan allí como parte de la basura espacial), por ejemplo.
La idea de ciudad satélite, en cambio, alude a un núcleo urbano o barrio que, si bien depende de un centro o territorio más grande, posee una cierta autonomía en su funcionamiento, tal como ocurre con la ciudad satélite de México y la que se conoce con el nombre de Maipú y se localiza en Santiago de Chile.
Al buscar más información que ayude a ampliar nuestros conocimientos generales acerca de los satélites, encontramos además clasificaciones puntuales que diversifican al concepto, como ocurre frente a las categorías de satélites asteroidales, satélites irregulares, satélites espías, satélites meteorológicos, satélites de reconocimiento, satélites de observación terrestre, satélites de energía solar, micro satélites, satélites miniaturizados y satélites de comunicaciones, entre muchos otros.