Ejemplos de sólidos
A nuestro alrededor existen tanto materias en estado líquido como productos sólidos. Estos últimos, como sabrán, se caracterizan por ser fuertes, macizos y tener una cierta firmeza.
Muchas son las particularidades que se reconocen al examinar un cuerpo sólido. Presentan, por mencionar un rasgo distintivo, una dureza tal que los vuelve resistentes. A la vez son frágiles, es decir, pueden quebrarse si se los golpea o se aplica una presión considerable sobre ellos. Tienen, además, un volumen constante y un formato bien definido.
Más allá de las cualidades y características de un sólido, resulta interesante reconocer qué clase de sólidos nos rodean. Ahí aparece, por ejemplo, el rubro de la alimentación.
A medida que un bebe crece comienzan a incorporarse, de manera escalonada y con el propósito de aportar todos los nutrientes, alimentos sólidos a la dieta del niño. Frutas trituradas, verduras convertidas en puré y carnes cortadas en trozos muy pequeños son parte de los productos sólidos que aparecen como opciones en esa etapa.
Por otra parte, existe un uso del concepto que no refiere a un objeto sino a algo fuerte y estable. Ejemplos: “Ese muchacho carece de argumentos sólidos que respalden sus acusaciones”, “El equipo jugó un partido sólido, sin mostrar puntos débiles”.
Otras oraciones que reflejan los múltiples significados de este vocablo:
“Necesito materiales sólidos de buena calidad para armar la maqueta”
“Las tintas sólidas son barras no tóxicas de colores que funcionan en las impresoras multifunción más modernas”
“Para acceder al puesto ofrecido por la empresa hay que tener espíritu de líder, creatividad e ideas sólidas”