Ejemplos de soluciones sólidas
No siempre el concepto de solución es sinónimo de respuesta o resultado. En Química y Física, por ejemplo, funciona como denominación para una mezcla o disolución.
En este sentido, pueden reconocerse diversas clases de soluciones, entre ellas, las sólidas. Para pertenecer a este grupo, al menos dos sustancias en estado sólido deben poder combinarse de manera homogénea. Hay, en base a las particularidades de cada mezcla, soluciones sólidas sustitucionales, soluciones sólidas intersticiales, soluciones sólidas con omisión, etc.
Al fusionar el estaño y el cobre, por citar una alternativa, se logra una solución sólida conocida como bronce. Las plagioclasas, por su parte, son resultado de una solución sólida de carácter isomorfo en la cual se pueden reconocer a la anortita, el sílice, el óxido de sodio y la albita, por mencionar algunos elementos que conforman a estas estructuras. El olivino, asimismo, surge como solución sólida a partir de la combinación de los minerales fayalita y forsterita, según informan los expertos en la materia. De igual modo, al hacer referencia a las disoluciones sólidas se puede mencionar el caso de la austenita (llamada también acero gamma o austerita), integrada por una disolución del carbono de hierro cuyo porcentaje varía de acuerdo a la temperatura.
Dato para tener en cuenta al buscar ejemplos e información sobre las soluciones sólidas: cuando una solución sólida que, en principio, logra homogeneidad quiebra su equilibrio al separarse en un par o más de minerales distintos sin quebrar la composición de dicho sistema, se comienza a hacer alusión a un caso de desmezcla.