Ejemplos de target
Target es un término de la lengua inglesa que puede traducirse como “objetivo” o “blanco”. Se trata de un concepto que se emplea en el ámbito de la mercadotecnia y la publicidad con referencia al sector al que apunta una campaña o un anuncio.
Tomemos el ejemplo de una cadena de comida rápida que decide publicitar sus productos en la televisión. Los expertos de marketing de la compañía consideran que el público más receptivo a sus propuestas es el adolescente. De este modo, definen que el target de la empresa es el grupo comprendido por jóvenes de entre 13 y 18 años. Con esto en mente, desarrollan una publicidad con lenguaje informal, componentes tecnológicos y música de rock, ya que estos elementos atraen la atención de su target.
Podemos encontrar otro ejemplo de target en la industria textil. Un diseñador de alta costura planea expandir su negocio y analiza dónde instalar una nueva tienda que venda sus productos. Este diseñador sabe, por su experiencia en el mercado, que su target son las mujeres mayores de 40 años con un elevado poder adquisitivo (es decir, tiene conocimientos de que la mayoría de sus compradoras pertenece a dicho conjunto poblacional). Partiendo de este dato, estudia diferentes variables y toma la decisión de instalar la tienda en un barrio X, en el cual el 90% de los habitantes pertenece a la clase alta y viven tres mujeres por cada hombre.
Todo emprendimiento comercial, por lo tanto, primero debe definir su target (a qué consumidores/clientes apunta) y luego orientar sus iniciativas de publicidad y marketing hacia dicho sector. Si tomamos el ejemplo de un hombre que fabrica calzado deportivo de manera artesanal, podemos decir que tiene que determinar su target (podría ser el grupo de hombres y mujeres de hasta 50 años) y después definir cómo acercar sus propuestas a dichas personas (entregando folletos publicitarios en la vía pública y publicando avisos en las redes sociales).