Ejemplos de teogonías
El diccionario presenta a la idea de teogonía como una palabra que permite describir la genealogía de dioses vinculados con el paganismo. A partir de la búsqueda de mayores precisiones, uno puede encontrar varias aplicaciones prácticas del concepto.
El poeta de la Antigua Grecia Hesíodo, por ejemplo, compuso una obra poética que, en español, se conoce como “Teogonía”. Allí se hace referencia, entre otras cuestiones, a la clase de los dioses que forman parte de la mitología griega y al surgimiento del cosmos. En la “Teogonía de Hesíodo”, según se cuenta, la diosa Anfítrite era una nereida descendiente de Doris y Nereo, mientras que la ninfa Ocirroe (una oceánide nacida por Tetis y Océano, según la mitología griega) podría haberse vinculado con Helios para darle origen a Fasis.
También es posible hacer foco en las teogonías órficas, donde se detalla la procedencia de los dioses. En este contexto, es posible identificar a la teogonía eudemia y a la teogonía o Papiro de Derveni.
Resulta interesante resaltar que, en las teogonías de mayor antigüedad, se puede encontrar, por citar un caso puntual, a Thesis, que dentro de la mitología griega es la diosa fundamental de la creación ya que no es descendiente de otros seres sino que brotó junto al universo. Las creencias órficas señalan que Thesis tuvo como herederos a Chronos, Ananké, Poros, Tecmor y Penia.
Por otra parte, se puede mencionar como otro provecho del término a la obra “La teogonía de los patriarcas”, del esoterista parisino Alexandre Saint Yves D’Alveydre.