Ejemplos de usufructo
El concepto de usufructo nace como derivación de un vocablo latino y hace referencia al acto de sacar provecho o beneficios de algo, así como también identifica al derecho de posesión que, excepto que la justicia falle de modo contrario, permite disponer y disfrutar bienes de otros siempre y cuando el beneficiario se comprometa a conservarlos.
De acuerdo a las características que tenga cada usufructo, éste puede clasificarse como simple (si sólo se favorece una única persona) o múltiple (modalidad que beneficia a un grupo de gente de manera simultánea o sucesiva); legal (contemplado por la legislación) o voluntario (si está expresado en un testamento o consta en un contrato); parcial (si únicamente avala la posesión de una parte) o total (si permite disponer de la totalidad del bien en cuestión). Asimismo, se lo puede considerar propio (si están en juego objetos que no se consumen) o impropio (si se trata de bienes de consumo).
A fin de hacer más sencillo el entendimiento de esta noción y evitar hacer foco en explicaciones complejas que exijan un grado mayor de conocimientos para lograr su comprensión, a continuación compartiremos con ustedes varios ejemplos de uso que permiten apreciar de forma práctica la aplicación de esta palabra.
“Las autoridades resolvieron ceder en usufructo varias hectáreas de terreno”
“La familia Juárez firmó con el Estado Nacional un contrato de usufructo”
“Ese organismo se encarga de gestionar las autorizaciones para el usufructo de recursos naturales con propósitos económicos”
“El usufructo privado de ese río está prohibido por ley”