Ejemplos de vaguedad

13 agosto, 2014

El resultado de algo vago, impreciso, ambiguo o indefinido se conoce como vaguedad. Por el significado que posee, este término se aplica en numerosas circunstancias, algunas de las cuales vamos a detallar a continuación para ayudarlos a identificar de manera sencilla y directa el uso práctico de esta noción.

vaguedadEntra en juego este vocablo, por ejemplo, ante la falta de precisiones y respaldos sólidos en el contenido de un fallo dado a conocer por un tribunal (ya sea en un entorno jurídico formal o bien en el marco de un concurso literario, por proponer dos posibilidades).

Un adolescente que intenta ocultar en su hogar la realidad de sus calificaciones para que sus padres no lo castiguen por su mal desempeño responderá con vaguedad y dará explicaciones ambiguas cada vez que los mayores le pregunten por sus avances académicos con la intención de llevar un control del rendimiento de su hijo en cada materia.

Un político, investigado por la Justicia en una causa por corrupción, puede responder con vaguedades las preguntas incisivas de un periodista que intenta obtener declaraciones que confirmen las sospechas.

Asimismo, también puede apelar a las vaguedades el empleado de una compañía internacional para intentar justificar ante sus superiores sus reiteradas llegadas tarde a la oficina sin revelar los verdaderos motivos de sus constantes tardanzas.

A partir de las situaciones señaladas líneas arriba, se pueden deducir muchas otras aplicaciones propias de entornos que difieran entre sí ya que es posible detectar casos de vaguedad en ámbitos formales e informales y con múltiples finalidades.