Ejemplos de vocales cerradas
En un artículo anterior señalamos cuáles son las vocales abiertas y ofrecimos ejemplos de uso para ayudarlos a conocer mejor a las letras que forman parte de nuestro abecedario. Hoy, la idea es complementar esos datos con referencias precisas hacia el grupo de las vocales cerradas.
Este conjunto está compuesto por la ‘i’ y la ‘u’, dos vocales que para ser pronunciadas de manera adecuada necesitan una distancia mínima entre el paladar y la lengua. En el caso de la quinta vocal, resulta interesante tener en cuenta además que, en ciertas ocasiones, cumple un rol silencioso (cuando queda en medio de la ‘q’ y la ‘i’ o la ‘e’, por ejemplo) y, en otras, ve modificado su sonido a raíz de la diéresis.
¿Palabras donde sólo aparezcan vocales cerradas? Hay varias, ya sea con y sin tilde: Luis, surubí, tuit, ligur, pulir, virus, iris…
¿Términos que combinen vocales cerradas y vocales abiertas? Tenemos muchas a disposición en nuestro idioma: acuoso, acuerdan, cuatro, seis, siete, peine, trueno, Paula, taiga, cacerío, fauna, tiene, acueste, cuadra, llueve, evacuados, mueblería…
De centrar nuestra atención en la ‘u’, por otra parte, podremos advertir sus usos especiales a través de vocablos como quedar, vergüenza, antigüedad, quinoa, pequinés, Quito, cheque, quemar, quinto, desagüe, aquí, inquieto, tanque, arranque, maqueta, agüita y volquete, entre muchos otros.
Como resulta evidente, existe dentro de nuestro vocabulario una gran cantidad de combinaciones que permiten vincular distintos tipos de vocales, aunque según cómo sea esa unión, no siempre estas letras permanecen en una misma sílaba debido a las pautas de las reglas ortográficas.