Ejemplos de conducción
Se hace alusión a la idea de conducción cuando hay que describir algo centrado en la acción de conducir.
En la práctica es posible hacer foco en la conducción de calor, como puede ocurrir con una cuchara de metal expuesta a altas temperaturas, por proponer una alternativa.
De querer asumir la conducción de un automóvil, en cambio, es fundamental conocer las reglas de tránsito y tener las habilitaciones correspondientes para circular, además de cumplir con una serie de requisitos que contribuyen a la seguridad tanto personal como de los demás (cinturones, no excederse de las velocidades permitidas, etc).
Asimismo, es común que en una nación consiga notoriedad la idea de conducción política. Esta expresión sirve tanto para marcar el liderazgo de un político dentro de un partido como para describir la gestión de alguien que llega a ejercer la presidencia de un país.
Estar al frente de un noticiero, programa televisivo o evento, por otra parte, también expande el alcance de este vocablo. Por ejemplo: “La conducción de la gala estuvo a cargo de dos reconocidos locutores”, “Dejó la conducción del noticiero para dedicarse a la literatura”, “La modelo, durante el móvil, aseguró que no tendría problemas en asumir la conducción del programa”, “El periodista podría dejar la conducción del envío matutino por diferencias con los directivos del canal”.
Si prestamos atención al rol de las neuronas y repasamos el rol de los axones, podremos aprender más sobre la conducción del impulso nervioso, un proceso basado en el desplazamiento del potencial de acción que se genera por modificaciones en la permeabilidad en la membrana de los axones.