Ejemplos de entalpía
Para comprender la aplicación práctica del concepto de entalpía primero es necesario repasar la teoría para saber qué es y para qué sirve.
De acuerdo a la definición propia del campo de la Física, es una magnitud termodinámica que se obtiene al sumar la energía interior de un cuerpo y el producto de su volumen por la presión externa.
Hay muchas clasificaciones y categorías. Es posible distinguir y trabajar entalpía termodinámica o entalpía química. Asimismo, puede variar la entalpía estándar en un sistema cuya materia ha sido transformada en condiciones normales a partir de una reacción química.
Se reconoce como entalpía de fusión, por otra parte, a la cantidad de energía que un cierto sistema es capaz de intercambiar con su entorno. Se trata de un calor latente que no varía significativamente al producirse un cambio de estado de la materia.
Analizar la entalpía de formación de un determinado compuesto químico es otra posibilidad para entender más sobre el tema. Si analizamos el agua, por señalar un caso puntual, encontraríamos que la entalpía de formación es equivalente a la entalpía de reacción que involucra al oxígeno diatómico y al hidrógeno diatómico.
Por último, podemos señalar las particularidades de la entalpía de vaporización, que indica la cantidad de energía que se necesita a fin de que la unidad de masa de una sustancia que esté equilibrada con su propio vapor pueda pasar de manera completa del estado líquido al gaseoso. Para el agua, según los expertos en el tema, la entalpía de vaporización es 40,65 kJ mol -1.