Ejemplos de neurosis
La teoría establece que una neurosis es una enfermedad psíquica de carácter funcional que se desarrolla en el sistema nervioso y se caracteriza, en primer lugar, por generar en quien la padece una evidente inestabilidad a nivel emocional. En la vida cotidiana, además, este concepto se asocia a trastornos mentales y a estados de obsesión y de profundo nerviosismo.
Una persona que en su niñez no ha podido resolver o superar determinados problemas emocionales crecerá con diversas clases de neurosis que afectarán su calidad de vida de manera progresiva si no pide o consigue a tiempo ayuda psicoterapéutica ya que el carácter del individuo va a reflejar de manera constante estos padecimientos. La neurosis obsesiva, por señalar un caso específico, se manifiesta desde las cuestiones mentales: quien la padece experimenta ansiedad, se abruma con preocupaciones y se muestra indeciso hasta para las determinaciones más simples de la vida cotidiana, razón por la cual evita encarar desafíos y poner en marcha proyectos tanto a nivel personal como profesional.
La neurosis histérica, en tanto, se manifiesta en el cuerpo a través de dolencias y trastornos provocados por desórdenes emocionales, siendo los más comunes los desequilibrios sexuales, las dificultades para conciliar el sueño, los problemas digestivos y las contracturas musculares.
Las fobias, por otra parte, dejan al descubierto neurosis que atentan contra la calidad de vida en la parte social, entorpeciendo o hasta imposibilitando los lazos. Estas personas tienen pánico a las reuniones, evitan estar rodeados por mucha gente y tienen miedo a toda acción que implique entablar un contacto con alguien, sea conocido o no.